¿Qué es la Criminalización Alimentaria?
Muchas veces, se tiende a categorizar, etiquetar o ponerle rotulo a los alimentos como
«buenos» o «malos» de manera rígida y moralizante. A mi entender, ese tipo de juicios puede
provocar una relación poco saludable con la comida, llegando a fomentar patrones de
alimentación restrictivos o excesivos.

Ni buenos ni malos, distintos…
Estamos de acuerdo que hay alimentos con distinto aporte o calidad nutricional, algunos más saludables y beneficiosos que otros, también productos recomendados para consumir con
mayor y menor frecuencia, eso no hay duda…
La criminalización de ciertos alimentos puede generar sentimientos de culpa, vergüenza o
hasta de estigmatización al consumirlos, mientras que la glorificación de otros alimentos
puede desencadenar una especie de obsesión por mantener una dieta «perfecta» o “ideal”.
Ambas actitudes justamente son provocadas por ese tipo de discriminación alimentaria.
Alimentación Flexible
La alimentación debe ser flexible y adaptativa, siendo fundamental EVALUAR EL CONTEXTO
para determinar su adecuación. Las necesidades nutricionales varían según el estado
nutricional de la persona, la etapa de su vida, el nivel y la frecuencia de su actividad física, sus
condiciones personales de salud, sus factores genéticos o hereditarios, entre otros. Un
enfoque tan estructurado basado solamente en el encasillado de bueno o malo, no se ajusta a
esta gran cantidad de variables individuales.
Educación alimentaria y nutricional siempre
Una mejor EDUCACIÓN ALIMENTARIA Y NUTRICIONAL fomenta una visión balanceada,
equilibrada y sobre todo OBJETIVA de los alimentos. Empoderar a las personas con mayor
conocimiento, no solo ayuda a tener un mejor control sobre su salud, sino que también
promueve la autonomía y la elección propia de sus alimentos.
Evitemos aumentar esa grieta entre blanco o negro, dejemos de lado ese tipo de juicios tan
categóricos como SIMPLISTAS.